¡Aprovecha los aprendizajes obtenidos en el año 2016!
Auto-reflexión: Toma un tiempo para hacer un alto en el camino y pregúntate:
¿Qué hice bien?
¿Qué no hice bien?
¿Qué puedo hacer diferente?
Escribe tus aprendizajes y descubrimientos.
Trátate a ti mismo como a tu mejor amigo. Se amable contigo mismo y recuerda que “éste es un ejercicio de aprendizaje y no un juicio acerca de tu comportamiento”
Pide Retroalimentación:
Busca buenos asesores, coaches, mentores y gente calificada que te puedan ayudar a entender con amplitud y profundidad tu evolución personal a lo largo del año 2016.
Hazles las mismas preguntas que tú te hiciste en tu proceso de auto-reflexión. Ellas te darán información muy valiosa para tener una mejor perspectiva acerca de ti mismo.
Solamente escucha a tus interlocutores buscando obtener datos valiosos sobre tu comportamiento. No necesitas estar o no de acuerdo, solamente se agradecido con las personas que te brindan información.
Capitaliza tu aprendizaje:
No cometas el error de tirar por la borda lo que aprendiste durante el año. Mejor construye un puente entre los años 2016 y 2017 como un proceso de mejora continua.
Continúa haciendo un buen trabajo en aprovechar tus fortalezas para continuar aprendiendo. La maestría viene de desarrollar tus talentos y llevarlos a un nivel de excelencia.
Comienza a desarrollar dos o tres nuevos hábitos para crear un impacto positivo en ti mismo y en aquellas personas que te rodean. Esta es una gran oportunidad de practicar el auto-reconocimiento y tener claridad sobre aquello que realmente haces bien.
Por ejemplo:
Da las gracias de forma sincera cuando otros te den su apoyo para lograr tus metas.
Haz dos o tres pequeñas pausas durante el horario de trabajo para tomar aire fresco, caminar al aire libre y respirar conscientemente.
Practica el dar reconocimiento cada día e invierte tiempo para aprender de personas exitosas, buenos mentores y gente que hace bien aquello que tú quieres aprender.
Deja de recriminarte y castigarte a ti mismo si no lograste ciertas metas que estableciste para el año 2016. La vida no es blanca o negra. Maneja tus debilidades y fallas como oportunidades para aprender y crecer. Pregúntate: ¿qué tan realistas eran mis metas?, ¿cuáles fueron aquellos factores que no me permitieron lograrlas?, ¿cómo puedo mejorar mi planeación y fijación de metas para el año 2017?
Recuerda, el buen juicio tal como lo define Hogan Assessment, tiene que ver con tu manera de procesar información, tomar decisiones y manejar la retroalimentación (¿eres resistente o receptivo cuando recibes retroalimentación?) Si logras desarrollar un mejor juicio, tomaras mejores decisiones reduciendo el número de equivocaciones que inhiben tu alto desempeño y tu crecimiento personal.
